Buenas mis niñas lindas. He tardado en escribirles porque me llamaron del Hospital Insular para operarme mis hijas, despues de monton de años en lista de espera. Cuando me llamo la chica, digole yo: jiesus queria casi me muero esperando. Pues me operaron hara unas semanas, porque cuando yo di a luz a mi hija Pimpa (Pino Mari) se me bajo la matriz y me estaba pisando la vejiga del orín y por ello se me escapaba la pis a ca rato. Ohh, yo me acuerdo cuando salía siempre tenía que llevar en el bolso las compresas para no mearme encima chiquillas. Yo estaba como Concha Velasco con las perdidas. Cuando yo me quede embarzada pa Pimpa se me quedaron los tobillos como los de Florinda Chico.Esta pobre estaba reonda y hermosa.
Pues mire mis hijas no me gusta nada los hospitales eso del demonio. Me dijeron Josefa venga usted un día antes para preparla pal quirofano. Me dejaron toda la noche sin comer ni una tila pa calmar los nervios me dejarpn beber mis hijas.
Se quedo aquella noche conmigo mi hija Fidela y Soledad, yo les dije vayanse pa casa que yo voy aestar bien pero ni por esas se fueron. Yo me quede más traquila con mis hijitas. Esa mañana yo estaba desalada y nerviosa.Antes de bajar reze todo lo que estaba escrito, hasta el latín que me acordaba de cuando antiguamente. Me encomende a la Virgen del Pino, el santo Cristo de Telde, Santa Rita y todo el santoral. Me vinieron a buscar tempranito sobre las 8 y me bajaron pa bajo pal quirofano. Me metieron en aquella habitación con aquella luz. La enfermera que se llamaba Ana era de Moya me dijo y que su padre era medico. Yo es que hablo con todos y el medico me dijo que no me iban a sedar toda sino de cintura pa abajo. Me pincharon en la columna, ay vi las estrellas. Pues el médico empezo a trajiniar allí pero yo me quede media embelesada y no me acuerdo de mucho.
Cuando sali y me llevaron pa la habitación estaba todo mi rancho allí, todos mis nietos, hijos, sobrinos y hermanas que cuando la enfermera entró va y dice: Jiesus viende gente hay aquí si parece el inem. yo le dije mi hija la familia es muy grande y vienen todos.
Estuve dos días ingresada con unas comidas que aquello no habia quien se lo tragara. Cuando se me pasó la rebujina que tenia en el estomago le dije a mi hija Fidela, Fidela hazme un potaje berros y me lo traes con un pisco queso duro pa comermerlo. Y asi lo hizo y me lo comí y me llego al alma queridas.
Cuando ya sali del hospital mis hijas me pusieron el traje de color azul oscuro que tengo yo y una rebeca negra que siempre voy yo así. Y asi llegue a mi casa. Mi madre siempre decia cuando llegaba a la casa: ay mi casita Dios me la de por destierro. Y yo ya digo lo mismo cada vez me paresco mas a mi santa madre que en paz descanse. Alli estaban mis hermanas, sobrinas, primas. Mi sobrina Carmensa me hizo un queque que estaba de rico que se mea la perra chiquillas. Ay que goza una al ver la casita llena de gente.
Hoy fui con mis hijas a pagar la promesa que le hize al Santo Cristo de Telde porque todo me salio bien y le puse un par de velas y me goze la misa. El cura de San Juan es una maravilla mis hijas da gusto oirlo.
Pues que les digo mis hijas ya por hoy me despido que estoy baldada de las piernas que ya hoy en Telde camine un monton. Un beso pa todas, cuidensen mucho, coman de todo y lleven el bolso unas bragas limpias por si se les ofrece, mujer precavida vale por dos. Un beso pa todas.
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