Mi madre

Buenas mis niñas lindas, este domingo es el día de las madres mis hijas. Ya tienen los besos y regalos preparados pa ese día, que miren que madre no hay mas que una y tenemos que cuidarla y quererla. Una es madre todos los dias del año pero en ese día nos sentimos especialmente queridas por nuestros hijos y nietos. Bien echo yo de menos a la mia, ay mi madre que buena era, Dios la tenga en su gloria. Fijense ustedes que mi madre murió con 94 años y tenía todo su tino y sacaba las cuentas mejor que yo. Todos los años mis hermanas y yo vamos al cementerio la vispera del dia de la madre y le llevamos un ramo de flores. Siempre esta en nuestros corazones mis niñas, ella siempre decía un dicho que toda la vida se ha escuchado: padre puede haber montones pero madre solo hay una. Toda la razon llevaba. Era una mujer sabia y se quitaba el pan de la boca pa darserlo al que lo necesitaba sin dudarlo. Ella preferia quedarse sin comer a que nadie se quedara con hambre. Asi era mi madre, buena hasta decir basta. Nunca dio lata fue una persona buena y cariñosa hasta que Dios se la llevo. Ella siempre decía: una sola cosa le pido a Dios, cuando quiera llevarme que sea rapido y no moleste a mis hijos. Y parece que Dios la escucho porque se acosto una noche de junio y no despertó mas, murió como vivió tranquila y en paz. Todavia recuerdo que el día que murio hacia calor y despues de cenar le di una ducha pa que se fuera fresquita a la cama. Siempre me decía Fefa hay que hacer el bien sin mirar a quien porque Dios esta arriba.
Una vez recuerdo cuando yo era pequeña era mala como el coño. No mala en el mal sentido sino que era desinquieta y una vez tendria yo unos 10 años o asi me subi al muro de mi vecina y le quite unos higos de una higuera que tenia en el patio. Pues contan mala pata que doña Olegaria la vecina me vio y fue a contarselo a mi madre. Mi madre era buena pero muy recta y lo que menos le gustaba es que nadie le trajese chismes sobre sus hijos. Mira llego yo a mi casa y me trinca y me pego dos buenos cholazos que me se me saltaron las lagrimas y me dijo como tu vuelvas a hacerlo mas ya veras tu. Mi madre nos crio bien y no le reprocho que alguna vez me diera una buena nalgada, porque criar a los hijos es dificil y una buena nalgada a tiempo siempre es buena, no abusar ni pegar por pegar.
Mi madre pa cocinar tenia una mano mis hijas, yo he conservado parte de esas recetas y me salen como las que ella hacia. Ella arreglaba todo tipos de carnes, frita, en salsa, en salmorejo el conejo que te lambiabas los besos de bueno. Cuando habia carne y eran dias de fiesta mi madre hacia carne en salsa y papas sancochadas y comiamos todos en su casa, los nietos que tenia por lo menos mas de 25. Hacia unos calderos grandes y siempre sobraba nunca fato ni nadie quedo sin comer. Me acuerdo que mis hijos se hinchaban a comer porque mi madre les ponia el plato lleno hasta arriba y cuando se lo habian acabado venia mi madre atras con el cucharon a echarles mas y esa mania la conservo yo con mis nietos. Mis hijas me dicen mama se van a poner los niños gordos, yo les digo vale mas que coman y esten fuertes y sanos y como decia mi madre comer por haber comido no hay nada perdido.

Tambien recuerdo ver a mi madre haciendo quesos. En mi casa tenia mi padre en la parte trasera de la casa unas cabritas y mi madre ordeñaba y hacia el queso. Parece que la estoy viendo sentada en una silla con la quesera apretando la cuajada pa que soltara el suero y le iba dando la forma. Ay que rico los quesos tiernos. Yo aprendi a hacer queso viendola a ella como lo hacia y cuando tenia la tiendita yo vendia los quesos tiernos y la gente me encargaba que se los hiciera por que se vendian por el aire.



Todavia conservo en mi casa la quesera con la que hacia los quesos. Mi madre como estaba mayor no se podia quedar sola en su casa y se iba quedando en casas de mis hermanas y en la mia. Yo le ponia su silla en la tienda y se ponia a despachar cuando habia mucha gente y sacaba las cuentas de memoria mas rapido que yo. Mis vecinas cuando murio la echaban de menos y el duelo de mi madre no cabia ni un alma de gente que vino, todos los vecinos fueron a dar el pesame. Eso si mi madre no se le quedaba ningun duelo que ir hasta que ya era mayor e ibamos nosotros por ella.
Pues mis hijas voy a estirar un rato las patas pa alli y a ver la novela un rato que me encanta. Un beso fuerte para todos y quieran mucho y denle cariño a sus madres que es lo mas grande que tenemos.